Barry Windsor-Smith: "Si alguna vez vienes a New York, pasa a visitarnos."

«Barry nos había mandado desde Londres algunas muestras de su dibujo, de inspiración kirbyana. Éstas eran suficientemente prometedoras como para que Stan Lee le mandara una nota que decía, en esencia: "Si alguna vez vienes a New York, pasa a visitarnos." Barry (junto con su amigo Steve Parkhouse) debió de ponerse en marcha de inmediato, porque en seguida llamó a nuestra puerta. Se le encargaron algunas historietas "de relleno", como por ejemplo un número de X-Men que Barry recuerda como el punto más bajo de su carrera. (¡Y no es para extrañarse! ¡En aquella época, ni siquiera tenía apartamento propio, y tuvo que hacer todo el trabajo sobre un banco de un parque!) Poco después trabajó con Stan, luego conmigo, en Daredevil, e hizo un trabajo notable, con el que se formó como dibujante. Pero, por desgracia, no se nos había ocurrido que Barry estaba trabajando para Marvel sin tener el permiso de residencia en los USA. Y así, un buen día, nuestros infatigables defensores de la Ley le dieron 24 horas, no sólo para salir de la ciudad, sino también del país. Así regresó a Gran Bretaña y comenzó un largo y laborioso proceso con el objetivo de volver a América.»¹ «Por entonces yo sólo conocía los cómics americanos. Stan Lee, Jack Kirby, Steve Ditko... Marvel Comics. Eso era lo que había, y mi único deseo era trabajar para Marvel. Así, a los 19 años me fui a América con Steve Parkhouse y contacté con Marvel. Stan Lee nos cogió aprecio enseguida. Yo era muy cockney y llevaba el pelo largo, y ambos hablábamos con ese extraño acento que nadie podía entender (...) Pasamos malos tiempos; vivimos en la pobreza. Pero yo estaba totalmente convencido de todo aquel asunto. Seguimos adelante, conseguí algunos trabajos, vivíamos en un hotel pringoso y recibíamos un estipendio mínimo. Nunca habíamos visto policías con armas y nos asustaba vivir en una ciudad violenta. Era el verano de 1968, tiempos violentos... Pero seguimos adelante y tanto Stan como Roy Thomas nos prestaron mucho apoyo moral. Finalmente, nuestra estancia en New York llegó a su fin porque estábamos allí con visados de turismo, y las autoridades de Inmigración nos obligaron a marchar. Regresamos a Inglaterra en noviembre de 1968. No pude volver a los USA hasta enero de 1971, con un permiso de trabajo y gracias a un abogado americano que Marvel me pagó. Cuando volvimos a Inglaterra, tenía poco trabajo y muchísimo tiempo para pensar y reconsiderarlo todo. Estaba madurando. Andaba tan sólo por los 19 o los 20 años. Era maleable. A Kirby lo tenía por lo mejor que los cómics habían sido, eran y llegarían a ser. Me parecía lógico dibujar cómics tal y como los dibujaba el mejor»² 

¹ Texto de Roy Thomas aparecido en Classic Conan nº1 

² Declaraciones de Barry Windsor-Smith en la UKCAC de 1986.